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Estoicismo – Meditaciones Estoicas 20 siglos después.

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Naturaleza Estoica: ¿Qué es vivir de acorde a ella? [DIA 62]

Una vez que ya tenemos más claro el tema de los indiferentes, con sus variantes preferidas y rechazadas; y hemos podido hacer un gran repaso al concepto en detalle de la Virtud Estoica, ahora toca recomponer todos estos elementos en uno solo, o lo que se suele leer mucho en los textos; vivir de acorde a la Naturaleza estoica.

En la meditación del día de hoy quiero ir dejando claro algunos conceptos sobre ello; es importante saber que aquí el concepto naturaleza, no es tan simplista como «Nacer, crecer, reproducirse y Morir». No es algo puramente físico, como la forma en que crecen los árboles o el movimiento de los planetas. Aquí hablamos de algo que integra todos los elementos del estoicismo: la Ética, la Física y la Lógica; la esencia de la vida según el estoicismo. Y tampoco es solo Ético como sugieren algunas variantes de la filosofía Estoica y veremos a continuación.

La cita Estoica del día

Puedes cercenar muchas cosas superfluas que te perturban y que no existen más que en tu imaginación; así, abrirás a tu espíritu un ancho campo con abarcar en tu pensamiento el universo entero, con traer a la memoria el tiempo infinito, con meditar la pronta transformación de cada cosa en particular, cuán breve espacio media desde su nacimiento hasta su ruina, cuán inmenso ha sido el que precedió a su generación, así como la eternidad que sucederá a su disolución. – Marco Aurelio, Meditaciones, Libro IX.32

En su libro «Stoicism», John Sellars insiste que Marco Aurelio, centra toda la obra de Meditaciones alrededor de un tema principal: La perspectiva Cósmica; un tema que trataré hoy de manera esencial, en la meditación estoica del día.

En cierto grado si es cierto que existen numerosos pasajes como el que he citado hoy, que hacen referencia a esta temática; pero en realidad bajo mi punto de vista, Marco Aurelio creo que centra mucho más el tiro orientado a la Disciplina de la Acción a través, evidentemente de la razón y el asentimiento. ¿Es posible que esto simbolice, que Marco Aurelio, en gran medida conjugue todos los aspectos de la Naturaleza Estoica en su única obra, que curiosamente, iba escrita exclusivamente para si mismo?

Hoy quiero trabajar sobre esto con más profundidad en adelante.

Meditaciones del Día: Extendiendo los límites de la Virtud para alcanzar la Naturaleza Estoica en su plena esencia

Sabemos que para alcanzar la Eudaimonia, es necesario ser Virtuoso. Y para ser Virtuoso hay que vivir de manera razonable. En definitiva, focalizar la atención al estado interno del alma, la correcta acción del asentimiento, que en consecuencia desecha focalizar en los elementos externos.

Vivir de acorde a la Naturaleza Estoica es una expresión del Estoicismo que no puede entenderse de manera literal. Yo de hecho cuando empecé, lo entendía tan de manera literal, como en el caso del Cinismo. Vivir de acorde a la naturaleza, como yo lo entendía, solo podría significar una cosa; comer, asegurar la subsistencia, la evolución de la especie, es decir, todo lo que en principio conocemos hasta ahora que simboliza ese precepto de la Naturaleza sin más. Pero efectivamente, como decía, no puede entenderse de manera literal. Vivir de acorde a la naturaleza es un concepto Ético, Físico y Lógico en el que debemos sustituir la palabra Naturaleza por «Leyes Físicas Estoicas».

Un breve Recordatorio de la Física Estoica, para entender la Naturaleza Estoica

He ahí quizá, la importancia de conocer todos los aspectos del Estoicismo. En gran medida si no se conocen, mucha de esta Ética puede no tener sentido. Vamos a recordar un poco resumiendo al máximo dado que hay muchos mensajes en esta página que diseccionan bastante la física estoica y no quiero extenderme en este articulo. Según el Estoicismo vivimos en un «Determinismo Estoico», es decir, todo lo que pasa y pasará esta determinado por el Universo. El Universo es la entidad máxima que rige y controla todo. El Universo en sí, es perfecto y por consiguiente es consciente. Nosotros tenemos una parte de esa perfección consciente; el Alma. Y gracias a ello, se nos da el permiso de «elegir» nuestras acciones (prohairesis). Hagamos lo que hagamos va a pasar de todas formas lo que tenga que pasar, pero la decisión de nuestra acción, va a determinar como ese resultado va a reflejarse en nuestra Alma. En otras palabras, si hacemos una acción tal y como requiere el Universo que la hagamos, nuestra Alma va a seguir intacta, pero si tomamos la decisión de hacerlo de otra manera, entonces nuestra alma va a ser perturbada.

El estado del Alma intacta es la llamada «Paz Mental» o Eudaimonia, y como sugerían los Estoicos, era el camino natural desde el nacimiento. Pero por causa del Oikeion, o la acción apropiada más básica, el estado va degenerando con el tiempo, a un estado de Alma perturbada, con necesidades, que se manifiestan como una Emoción dañina en el cuerpo y el espíritu. La Emoción puede ser desde la pena, miedo, éxtasis u odio entre muchos otros estados perturbados. En cualquiera de los casos, estos estados perturbados del Alma pueden seguir degenerando y en definitiva, haciéndonos sentir bastante mal y también obrar erráticamente, en contra de nosotros mismos o incluso del a sociedad.

Ayer comentábamos que solo había una manera de elegir acciones correctamente, y es a través de la Razón. Esa Razón es justamente una propiedad del Alma que nos ha cedido el Universo de manera especial para obrar en consecuencia. Podemos disfrutar de comer un helado, pero debemos comerlo razonablemente. A este hecho de «comer razonablemente» es denominado la Excelencia o Virtud, como comentábamos hace poco. También es posible comer de manera no razonable, pero si apropiadamente (Oikeion), simplemente por impulso, y esto es algo que compartimos con el resto de los animales. En principio no hacemos daño a nadie, y podría ser simplemente adecuado, pero no Virtuoso. La Máxima Virtud o Excelencia se alcanza cuando la Razón esta presente el 100 % de nuestro momento presente. Y esa Excelencia solo la tiene el hombre Sabio, o el Sabio estoico. Y con esto ya podríamos decir que estamos al día.

La Naturaleza Estoica tal como la cuentas me chirría bastante, ¿que debo hacer?

En principio mi recomendación ante esta pregunta y en este punto, es que vuelvas a leer todos los días atrás hasta este. Si te fijas todos los mensajes pone [DIA XX] siendo XX el número del día en el que empecé las meditaciones. Leyendo todo atrás, es posible que llegues a las mismas conclusiones que llegué yo con el tiempo.

Pero si lo que te chirría es aquello a lo que hago referencia como Física Estoica, tenemos un problema. Los Estoicos Modernos trataron de solucionarlo, aplicando el método Kantiano y es superponiendo la Razón a la Física (suena Virtuoso ¿verdad?). El problema es que automáticamente el concepto de Virtud perdería todo sentido, con lo cual esta idea no es tan razonable como suena a priori. Esto es por una sencilla razón: ¿Como podemos explicarnos que es y que no es lo Correcto? ¿Que es justo y que no es justo? Tendríamos que recurrir a artificios como la Justicia Positiva que sugería Aristóteles. En cambio, según la Naturaleza Estoica, todo es muy sencillo; siempre que se haga algo desde la razón, es Virtuoso. Literalmente lo que sea.

Imagínate un Juicio estoico. El Juez pregunta al acusado de haber robado comida de un supermercado:

– ¿Actuó usted de acorde a la Razón?
– Si, señoría
– Caso sobreseído

Si entiendes el concepto de que así es como debía ser según tenía previsto el Universo, entonces no hay problema, ¿cierto? Pero… ¿que pasa con la ética, la moral, los valores? ¿En este caso, como sabemos que robó para dar de comer a su familia en situación de enrome pobreza, o si simplemente robó por pura codicia? ¿Es realmente suficiente solo la Razón?

En este punto, llega Platón y luego Aristóteles, que en gran medida fueron los precursores de todo esto. En realidad Platón y Aristóteles fueron los precursores de la cultura occidental, tal y como la conocemos ahora. Con sus Virtudes Cardinales (la Magnanimidad, la Justicia, El Coraje, …) , con sus emociones pasionales que motivan a hacer grandes hazañas épicas, con su división del Alma en tres partes que explica en cierto grado porque hacemos lo que hacemos y porque a veces somos tan incongruentes con nuestros pensamientos. En definitiva todo un paradigma social, que hemos aceptado hasta sus raíces y no concebimos de otra manera, después de habernos metido en esta cultura hasta las más profundas entrañas. Si a esto le sumamos que nos encontramos en plena Era Secular, en la que no aceptamos fuerzas ocultas más alla del cable que se enchufa y da luz al ordenador, entonces tenemos un cocktail perfecto, para rechazar la Naturaleza Estoica desde su Raíz.

Y con ello, y si nos gustan algunas pequeñas historias del estoicismo, pues toca empezar a hacer lo que hicieron algunos antiguos estoicos en su momento, y a lo que se denominó el eclecticismo Estoico. Cogemos esto de aquí y de allá. Si Aristóteles habla de Virtud, y Zenón de Citio también menciona algo sobre la Virtud, !pues listo! Cogemos el capítulo que habla sobre la Virtud de Ética Nicomáquea de Aristóteles y lo copiamos en nuestro próximo manual de Estoicismo. Asunto resuelto. Y reconozco que en gran medida esto ya lo hice yo en una de mis entradas, en mi más absoluto desconcierto en el entendimiento del la Ética Estoica. Pero claro, con el tiempo empezarán a emerger miles de incongruencias, como ya hacía referencia hace varias semanas.

Conclusión: Al final tenemos dos opciones, tal y como comentaba hace poco:

  1.  Nos hacemos Estoicos Modernos para vender algún que otro libro, como un mezclum de varias filosofías helenísticas que suena todo muy comercial (o incluso alguna filosofía más contemporáneas metida por ahí por medio)
  2. Aplicamos algunos de los conceptos sueltos del Estoicismo, como Hacks Mentales. Visualización Negativa, como forma de Intención Paradójica, tal y como hizo Viktor Frankl o ya puestos, incluso podemos sacar una terapia psicológica entera, al puro estilo de Steven C. Hayes

La Alternativa Real: En cierto grado hay que hacer un esfuerzo de concebir la Naturaleza Estoica

No es posible ser completamente «laico» para poder entender la Naturaleza Estoica, pero yo personalmente creo que he encontrado algunos mecanismos mentales que me permiten entender mejor todo esto. Si te dedicas a la Física Teórica y tienes creencias totalmente opuestas a lo que yo comentaré a continuación, es muy improbable que esta  propuesta llegue a ninguna parte contigo. Pero si en gran medida estás abierto a grandes hipótesis de los últimos tiempos, todavía hay alternativas.

En primera instancia, es necesario entender que una hipótesis es una hipótesis, y por ende saber donde está el verdadero valor de la misma. Si no vas a ser investigador y trabajar inherentemente sobre ella, tampoco debería preocuparte en demasía la falsabilidad o la veracidad de la misma. Quizá la única posibilidad es que algún día se refute, y por consiguiente hayas vivido en una gran mentira, como les pasó a los Vitalistas, pero en este punto, hay que correr algun riesgo. Esto es lo que suelen llamar, «Fe»: Creer en una hipótesis, aun a expensas de que mañana la refute alguien.

Partiendo de esta primera instancia, lo segundo, es entender algunos principios básicos que puedan quizá facilitar un poco la digestión.

En primer lugar: ¿Es quizá posible que existan estados en las partículas que simbolicen el grado de consciencia? Aunque escape a mi raciocinio, yo no lo veo un disparate. Es decir, al igual que hay Átomos que tienen mayor o menor número de protones, por ejemplo el Hidrógeno tiene 1 y el Uranio tiene 92, y con ello, se combinen formando componentes superiores, incluyendo la materia orgánica; por tanto es posible que exista una variable, que sea el grado de consciencia de un elemento, o de un grupo de elementos. Con ello, con un descubrimiento de este tipo dentro de 500 años, quizá hallaríamos la explicación de porque el ser humano es consciente, y es posible que esa «materia consciente» existiera en otras partículas que nos rodean o más alla en el universo en mayor o menor medida.

En gran medida, esto soy capaz de asimilarlo, por una causa semejante al ejemplo del Éter; un campo del que hablaba incluso Zenón 300 años antes de Cristo, y que hoy en día, una gran cantidad de científicos experimentan para lograr averiguar si realmente existe: Le Bosón de Higgs. Por este mismo principio, llego a aceptar, la anterior hipótesis. Así de simple.

Por otro lado, me gusta observar una cosa: Muchas veces, sobre todo en las películas, la consciencia parece que se tiene que medir por fuerza, según el grado de emoción. Ejemplo: «En ciertas películas, un robot puede ser consciente, inteligente y equivalente a un ser humano en todos los sentidos; pero siempre hay algo que le falla: no lo hace humano porque no tiene emociones».

Pero ahora recordemos una cosa; según el Estoicismo, el máximo grado de razonamiento, simbolizaría el mínimo (nulo) número de emociones. Es decir, que el Sabio Estoico, es aquel que habría alcanzado el máximo apogeo de Excelencia, y por tanto su asentimiento sería al 100%. Y una persona con un 100% de asentimiento no tendría pasión alguna. En cierto grado podría ser equivalente al Robot de las películas. ¿Es posible que esta sea la causa, de que no identifiquemos la razón más allá del ser humano? Los animales en cambio, son altamente pasionales, se enzarzan en peleas de territorios, se les condiciona muy rápidamente a traves de sistemas de condicionamiento muy primitivos como un «Clicker», etc… Todo en principio, motivo de un bajo grado de consciencia, o ningun grado de consciencia en absoluto, y un alto grado de impulso, o de emoción. Y aún así seguimos (y probablemente seguiremos) viéndolos como seres algo inferiores a nivel moral, justamente porque falta eso: El grado de consciencia. Es por ello que en realidad la diferencia puede que no este en las emociones que muchas veces se sugiere en las películas, sino en otro componente más parecido a la Razón.

La razón como último fin para vivir de acorde a la Naturaleza Estoica

Pero debo dejar claro, que todo esto, es puramente hipotético. Solo sirve para encajar un poco la teoría para luego dirigirnos a la práctica. Simplemente el hecho de aceptar que todo esto es POSIBLE, independientemente de si es probable o no, quizá nos permitiría llegar a aceptar, que la razón es lo único que importa. Sino, ¿que sentido habría en alcanzar el máximo nivel de asentimiento o razón? Ninguno

De hecho, justamente la Escuela Peripatética se caracterizaba por este aporte: En la moderación o en el punto intermedio se encontraba el Bien. Por ello, la ira en moderación es positiva según la escuela Peripatética, porque invita a una forma de motivación. Como para reclamar las injusticias sociales o para pelear de forma valiente en una Guerra. Pero como ya decía Séneca, la Ira en realidad no trae nada bueno, ni con moderación ni sin moderación. Porque como ya decía antes, la pasión solo trae más pasión:

La ira, en fin, nada útil tiene en sí, nada que impulse al ánimo a las cosas bélicas; porque nunca se apoyó la virtud en el vicio, bastándose a sí misma. Cuantas veces necesita realizar esfuerzos, no se irrita; irguese, y, según lo considera necesario, se anima o se calma; así, pues, cuando las máquinas lanzan los dardos, su alcance depende del que los dirige. «La ira, dice Aristóteles, es necesaria; de nada se triunfa sin ella, si no llena al alma, si no calienta al corazón; debe, pues, servirnos, no como jefe, sino como soldado». Esto es falso. Porque si escucha a la razón y se deja conducir a donde la llevan, ya no es ira, cuyo carácter propio es la rebelión. Si resiste, si arrastrada por sus caprichos y presunción no se detiene cuando se la manda, es para el alma un instrumento tan inútil como el soldado que no obedece a la señal de retirada. Séneca, De la Ira, Libro I.9

El ser humano es finito según la Naturaleza Estoica.

En cierto grado los primeros estoicos quedaron ahí. La búsqueda de la razón absoluta, sin mucho más misterio. Pero de aquí empezaron a surgir un nuevo nivel de cuestiones. En primera instancia, nosotros somos una entidad de materia, y como entidad de materia somos finitos. Esto quiere decir que como cualquier unidad finita externa tiene limitada su libertad.

Esto fue en gran medida el argumento para alejarse del ascetismo Cínico. ¿Que sentido tiene huir de todo, si al final no podemos huir de lo más básico?: La vida y el cuerpo. Como diría Epicteto:

Entonces, ¿quién es estoico? Igual que llamamos estatua fidíaca a la modelada según el arte de Fidias, así también mostradme uno modelado según las doctrinas de que habla. Mostradme uno enfermo y contento, en peligro y contento, muriendo y contento, exiliado y contento, desprestigiado y contento. Mostrármelo. Por los dioses, deseo ver un estoico. Pero no podéis mostrarme a nadie modelado así. Mostradme, al menos, uno que se esté modelando, uno con inclinación a ello. Hacedme el favor. ¡No privéis a un anciano de ver un espectáculo que hasta ahora no vio! – Epicteto, Disertaciones con Arriano, Libro II, 19.23-25

En este caso, solo una persona que haya cultivado la Virtud al máximo, sería realmente inmune a la adversidad; y del mismo modo, esta es la razón por la que la Virtud se trabaja a través de la adversidad. Pero el simple hecho de despojarse de todo, no implica que en cierto grado podamos despojaros literalmente de -todo-. Siempre hay algo. Y en última instancia esta la vida. Y es por ello que deshacerse de la Vida no suele ser propio de la razón. Y aunque algunos estoicos dieron posibilidades de cuando es razonable hacerlo, generalmente no lo es.

En este caso según la naturaleza estoica, es imposible llegar a la condición del Sabio estoico por una sencilla razón; siempre hay algo que nos va a tener atados. Algo que vamos a preferir (un preferido indiferente), antes que la razón de deshacernos de ello. Porque somos «finitos» dentro de la conceptualización de la naturaleza estoica. Y esto puede ser uno de los motivos por los cuales los Estoicos, no denominaran nunca a un Sabio Estoico definitivamente. Esto ya lo sabía también Epicteto y lo decía; en cierto grado, estaremos completamente atados tarde o temprano a algo finito como nosotros. Incluso algo tan básico como el mismo agua.

Por consiguiente: ¿Es posible que el camino, no esté en dejar de ser finitos, sino en aceptar este estado finito pero plantearse otra actitud ante la vida?

Moral Estoica: Subiendo un nivel en el fin de la Naturaleza Estoica

Sabemos que en la práctica y según la naturaleza estoica, la Virtud sería: «Analizar los Juicios para solo asentir ante las impresiones adecuadas, y con ello evitaremos esas reacciones violentas fruto de Asentir erróneamente». Recordemos el concepto de asentir y de impresión adecuada, a raíz de la Lógica Estoica

Sabemos que la razón (la capacidad de asentir), se encuentra en distinguir entre lo externo y lo interno. Esto quiere decir que en cierto grado, al asentir, nos hacemos cada vez más conscientes de que no estamos solos, y que en gran medida somos un elemento dentro de algo más grande. Algo más grande que podemos concebir o entender en mayor o menor medida, pero en definitiva, algo que esta fuera de nuestro control, pero incide directamente sobre nosotros. En cierta medida, esta acción consiste en ampliar en circulo de pertenencia (Oikeiosis), más alla de nosotros mismos. Y la razón humana en su máximo esplendor permitiría ampliar el circulo de pertenencia o de «cuidado» hasta incluso, llegar a «fusionarlo» con el del Universo al completo. O lo que es lo mismo: Que nuestras acciones vayan siempre dirigidas, con cierto cariño, a preocuparnos sobre todo el Universo al completo como máximo nivel de Oikeiosis. Esto en resumen es la esencia de la moral estoica.

Esto en la práctica es más complejo de lo que comento, y me gustaría seguir profundizando en ello en los próximos días. Así para terminar hoy quiero destacar que existen dos elementos fundamentales a la hora de entender el aspecto más sistemático de la Virtud:

  • Por un lado tenemos la perspectiva interna, es decir, el razonamiento interno, y el conocimiento de que el control solo está en nosotros y no en los eventos externos, independientemente de que sean indiferentes preferidos o rechazados
  • Si echamos la vista más alla de nuestro interior, tendríamos la perspectiva externa, que nos da el conocimiento de saber, que somos uno más dentro de algo más grande. Limitar nuestra perspectiva a que somos una entidad independiente con respecto a la Naturaleza estoica, también es un error, un juicio falso. Y es a esto a lo que se llama la Perspectiva Cósmica. Otra de las razones por la que es importante entender la Física Estoica, como explicación de la Naturaleza Estoica.

La cosa se puede complicar aun más. ya Epicteto, en el segundo Libro, parece que flexibilizó su postura con respecto a la que comentaba con respecto a los Indiferentes que no estan bajo nuestro control y dijo así:

Entonces, ¿qué es lo que sucede? Es como si uno, al ir a su patria y pasar por una buena posada, por gustarle la posada se quedara en la posada. Hombre, ¿has olvidado tu propósito? No es que vinieras aquí, sino por aquí. «Pero esto es bonito». ¡Cuántas otras posadas bonitas, cuántos prados! Pero simplemente como lugar de paso. Que el propósito era regresar a tu patria, librar a los tuyos de preocupaciones, hacer tú lo propio del ciudadano, casarte, tener hijos, desempeñar las magistraturas acostumbradas. No has venido a elegir los sitios más bonitos, sino a desenvolverte en aquellos en los que naciste y en los que se te tiene por ciudadano. Algo así es lo que también aquí sucede. Pero, puesto que por medio del discurso y de tal enseñanza se ha de ir hacia la perfección y a purificar el propio albedrío y a disponer correctamente de la facultad de usar las representaciones, y es necesario que la enseñanza de los preceptos tenga lugar por medio de determinada expresión y con cierta variedad y agudeza en las palabras, por su efecto algunos de éstos se quedan en eso, atrapados, uno por la elocución, otro por los silogismos, otro por los equívocos, otro por alguna otra de esas posadas y, al quedarse allí, se pudren como con las Sirenas. – Epicteto, Disertaciones con Arriano, Libro II, 23.36-40

Aquí Epicteto saca de la manga otro tema: Los Valores y los Propósitos en la vida. Parece como que hay algo más allá de la «simple» Virtud de atender a la razón, y que conjuga la perspectiva externa con la interna y la naturaleza estoica, para dotar de un «objetivo» al ser humano. En cierto grado, parece como que volvemos al primer día con esto, cuando hablaba por ejemplo, de la Competición y el Estoicismo

¿Es posible que esté dando vueltas en círculos?

2 comentarios en «Naturaleza Estoica: ¿Qué es vivir de acorde a ella? [DIA 62]»

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