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Estoicismo – Meditaciones Estoicas 20 siglos después.

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Intelectualismo hacia alcanzar el Estoicismo [DIA 42]

Este tema de «enfrentar» los conceptos del intelectualismo, como se denominaban a nivel de filosofías clásicas; en relación a otro tipo de filosofías como comentaba más recientemente, con un enfoque eminentemente más práctico como es el estoicismo; parece ser un tema que tenía que salir tarde o temprano.

Aunque realmente no era consciente de hasta que punto esto podría llegar a darse en este ámbito, porque hay que entender mi espectro acerca del aspecto de la filosofía clásica especialmente era (y sigue siendo), limitado. Poco a poco iremos adentrándonos en las diferentes vicisitudes que se originan; y plantearé, como el estoicismo se destaca, o más bien, se diferencia del resto.

La cita Estoica del día

Para el animal racional le es sólo insoportable lo irracional, mas lo racional soportable. Los azotes no son insoportables por naturaleza. ¿En que manera? Mira como: Los lacedemonios sufren azotes porque saben que ello es racional. – Epicteto, Pláticas con Arriano, Libro I.2.1-2

Este tipo de reflexiones arcaicas no tienen parangón. Los lacedemonios eran los Espartanos. A los Espartanos siempre se les ha considerado por emplear técnicas de aguante, de sufrimiento y dolor para resistir ante los enemigos. Se ejecutaban prácticas muy duras, por parte de los Espartanos, dado que las sensaciones de debilidad no eran aceptadas, y dado el caso, se castigaba con latigazos a los que las infundían o poseían (principalmente a niños). En cierta medida se consideraba una práctica de la razón, y por tanto como comenta Epicteto, soportable. Lo insoportable es lo irracional, lo que se escapa a nuestra razón por el motivo que sea. Para el hombre sabio, nada escapa a su razón.

Este tema es muy interesante, porque para llegar a la razón suprema, se llega a través principalmente de la práctica y en otra medida de la lógica. Llegados a la razón según comenta Epicteto, todo sería soportable, por tanto, se alcanzaría de alguna forma, la Eudaimonia. Más adelante profundizaremos en la lógica también.

Experiencia y Meditación del día: Del intelectualismo origen, a teorías más avanzadas del empirismo

Hoy como parte de mi meditación y experiencia del día me voy a meter en un tema un poco escabroso, el cual solo quiero introducirme y plantar algunas semillas, pero no tengo todavía 100% claro y necesito profundizar mucho más en los próximos días. Para entender al Estoicismo, en parte, hay que entender la cuestión de: ¿por qué no simplemente adentrarse en otras filosofías que nacieron antes? Porque si es cierto, que en cierta medida unas se nutrieron de otras; y pueda parecer como si las consecuentes, fueran sucesivas evoluciones de las originales.

Más allá de entender la figura de la filosofía Estoica, es primero importante entender un concepto surgido de filosofías previas, más cercanas al origen de Socrates, todo entorno al concepto del Intelectualismo. Pero… ¿Que es el intelectualismo? O al menos ¿como se concibe en relación al Estoicismo?

En primer lugar hay que entender un poco como concebían en la antigüedad, la diferencia entre el cuerpo y el alma. Para entender el intelectualismo, en gran medida también hay que entender el alma. En cierto nivel el alma se consideraba de diferente manera, muchas explicaciones para un mismo concepto. Pero la forma mas resumida de definir el alma bajo mi punto de vista era una. Todo aquello que hay diferente entre un cuerpo inerte y un cuerpo vivo. Eso es el alma, así de fácil: No tiene ningun misterio, ninguna espiritualidad, y no transciende mucho más allá de nuestro conocimiento o nuestra razón. Si pudiéramos hacer un listado de elementos que observamos entre un cuerpo inerte y un cuerpo con vida, estaríamos describiendo a la perfección lo que los antiguos denominaban alma.

La escuela del intelectualismo Socrático: El Alma Monista

Para la escuela de Socrates, el alma era muy simplista. De hecho era considerada alma monista, es decir, solo había un alma, y todo se regía por el mismo elemento, la razón. Por ende, existía mucha lógica en pensar un elemento y temática principal. Si uno asume y entiende los principios teóricos que se introducen en el alma, ¿que necesidad hay de ejecutar nada más, para obrar de la manera correcta, es decir, de manera virtuosa?

En cierta medida esto viene a significar; en el momento que una persona tenga un entendimiento cristalino de que simboliza la Virtud, que conforma la Virtud, que es la Virtud y en definitiva todos los componentes que atañe a la Virtud y sabe claramente el beneficio que esto aporta: ¿No debería entonces actuar conforme a la Virtud sin necesidad de nada más?

Para Sócrates, esto era totalmente trivial. De hecho hoy en día esto se sigue aplicando en terapia psicológica y se sigue asumiendo en miles de millones de libros de auto-ayuda que estan ahí fuera. Incluso existen libros teóricamente estoicos, que también profesan este intelectualismo entre sus lineas. La industria del pensamiento floreciente, del aspecto «cognitivo» de la mente, el intelectualismo. O lo que es lo mismo, el aspecto monista.

¿Pero cual a día de hoy, es el reflejo más «material» del alma? Siguiendo abierto a diferentes visiones, yo diría particularmente una; el cerebro. El cerebro considerándolo como el motor el alma, al igual que el corazón es el motor del cuerpo.

¿Es la era de la decadencia del intelectualismo? ¿O es el momento del esplendor?

Títulos como «Cree en ti», o «El arte de no amargarse la vida» inundan las estanterías de cualquier librería; sorprende observar que pese a ser una «disciplina» relativamente nueva, se encuentra ya en la décima posición en cantidad de libros por categorías por encima de la Economía y muy por encima de la Cocina. Libros de este tipo que tratan de introducir la terapia cognitiva como una forma de intelectualismo a través de la filosofía. Y lo más curioso que en términos generales, vamos hacia atrás. Esto no ayuda. En gran medida este aspecto formal de intelectualismo, en vez de motivarnos, nos atrapa e inmoviliza aún mas. ¿Es posible que el Intelectualismo sea inútil para tratar con el Alma?

Es más en cierta medida hoy, después de los avances neurológicos, que no psiquiátricos, ya nos dimos cuentas que el alma monista era un concepto desfasado. Existe más de un alma. Por tanto habría que primero entender si realmente el Intelectualismo tiene lugar en algún sitio. Quizá Posidonio tenía razón. Posidonio, al igual que Platón, establecía tres almas. Si existían tres almas, entonces esta trivialidad que planteaba Socrates desde el más puro intelectualismo, quizá no era tan trivial.

Pero lo más curioso de todo esto, es que los primeros Estoicos, observaron el concepto del alma, también desde una perspectiva monista. Es increíblemente  difícil entender como conjugaron los primeros estoicos, esta idea del alma monista simultaneando con otros conceptos como el de la práctica estoica; recordando las implicaciones que tenía sostener esta idea y avanzar en una lógica y dialéctica corruptas por seguir tratando con esta implicación. En realidad los filósofos posteriores, de la época romana, ya habían abandonado un poco esta postura estricta del intelectualismo; pero no del todo, seguían aceptando el concepto de alma monista paradójicamente; aunque tuvieron mucha más libertad para implementar una serie de elementos tales y como los conocemos en la actualidad. Eso de lo que ya he ido hablando en sucesivos mensajes en los últimos días: Las aplicaciones prácticas del Estoicismo principalmente, como una forma de habituación y digestión de la teoría.

¿Como era posible que sin haber abandonado del todo, o teniendo asumido el concepto de alma monista por completo, pudieran conjugarse las teorías estoicas, acerca de la práctica estoica, y la necesidad de su ejecución como forma de habituación?

Rompiendo con el intelectualismo: La Virtud es un arte, y todo arte necesita práctica.

Solo existe una forma de responder a esta pregunta. Entiendo que la filosofía enseña el arte de vivir bien, al igual que la medicina enseña el arte de tratar el cuerpo, o la música, el arte de organizar el sonido y el silencio. ¿Es posible aprender a tocar un instrumento sin haber cogido uno entre las manos? ¿Podría el intelectualismo de Socrates refutar esto? ¿Alguien se pondría en manos de un médico que supiese de memoria todos los aspectos de la medicina y podria recitarlos con precisión y convencimiento total?

¿Es posible que vivir también fuera un arte? De hecho, Epicteto no presentaba como tal el hecho de vivir. Sino más específicamente el hecho de vivir Virtuosamente. Epicteto e incluso los primeros estoicos como Crisipo se hacían la pregunta: ¿Es posible ser virtuoso correctamente sin haber practicado al igual que un médico deba amputar un miembro correctamente sin haber hecho nunca su labor?

Como viene siendo común en todas las historias estoicas, solo hubo uno que objetó a esto: Aristón de Quíos. Según Aristón, los ejercicios sin conocimiento de la doctrina, eran inútiles, mientras que los ejercicios para un sabio (alguien libre de ignorancia), eran superfluos. Tiene mucho sentido. Porque en gran medida, no lo digo con certeza, pero creo que Aristón no creía en el Prokopton ni en el Prokope de Crisipo. Como ya comentaba hace algunos días, el Prokopton es la disciplina de la excusa, y para muchos, ha servido y puede servir toda la vida para excusarse; frase del tipo «Es que no he practicado suficiente» o «Es que no he alcanzado la maestría» forman parte del Prokope.

¿Hacia donde dirige la práctica frente al intelectualismo?

Pero hay un concepto que Aristón no manejaba en su set de herramientas. Como Nassim Nicholas Taleb, parece que estamos condicionados al blanco y al negro, al fuerte y al débil, al resiliente y al frágil. Pero, ¿que pasaría si hubiera un tercer componente en la ecuación? ¿Que pasaría si la práctica no solo derivará en mayor resiliencia (que no resiliencia perfecta, como estimaban los estoicos, que era la que tenía el sabio), sino algo algo diferente? ¿Estaríamos hablando de la Anti-fragilidad que Taleb propone? ¿Hablamos de beneficiarnos del desorden? ¿Hablamos de beneficiarnos de los rechazados indiferentes? ¿Es posible salir beneficiado de una bancarrota o de quedar arruinado sin un duro en la calle? ¿Es posible salir beneficiado de la muerte de un familiar cercano? ¿Es posible salir beneficiado de un accidente brutal? Son preguntas que certeramente en el libro que N. Taleb, no las trata ni expresa de cerca. En este caso habla mucho más de eventos económicos, y de algunos pequeños ejemplos como inversiones fallidas, o algunos mecanismos simbólicos de como actua la anti-fragilidad, como en el tema de levantamiento de peso o la hormesis en la salud.

Después de tanta pregunta, parece que he entrado en modo Socrático, y esto paradójicamente después de haberme pasado media meditación desmontando gran parte de sus componentes principales.

Creo que todavía queda mucho por delante. Esta bien ir abriendo algunas cuestiones en el frente, para poder seguir trabajándolas a lo largo de estos meses. Sin extenderme más voy a dejar esta temática aquí y espero poder sacar el tema con más y mejor contenido en el futuro.

2 comentarios en «Intelectualismo hacia alcanzar el Estoicismo [DIA 42]»

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